A pesar de la pandemia, la inflación y la desaceleración económica, el sector inmobiliario cerró un muy buen año 2021. De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, el pasado mes de enero se alcanzó la cifra de 52.684 viviendas vendidas, encadenado 11 meses de incrementos llegando a una cifra solo superada en enero de 2008.
El volumen de las operaciones ha sido muy alto, sin embargo, los precios han evolucionado de forma moderada pero, constante, lo que indica buena salud en el sector, pero una inflación desbocada y una guerra de inciertas consecuencias ha creado una fuerte incertidumbre.
La inflación comenzó a generarse el pasado año, con una alta liquidez producida por la afluencia de dinero desde los bancos centrales, un alto ahorro entre los consumidores producido por la pandemia y unos precios energéticos al alza.
Y la solución no parce sencilla, con el país con un alto endeudamiento y con escaso margen de maniobra para actuar sobra la fiscalidad de la energía y los combustibles, lo que perjudicará a la larga a las economías familiares y a la competitividad industrial.
La inflación que cerró el 2021 en un 6,5% y que este año podría llegar al 7% o más, junto a la volatilidad de las bolsas y el escaso o nulo rendimiento de los bonos está atrayendo a mucho pequeño ahorrador a refugiar su capital en el ladrillo para que su pequeño capital no se devalúe.
A nivel macro vemos muchas variables tambaleándose, la debilidad de la economía, que no permitirá subir salarios, reducción de los beneficios empresariales, el crecimiento de los precios, que hará caer el consumo y por otro el posible incremento del precio del dinero. Tampoco hay que descartar un endurecimiento en las condiciones crediticias, los bancos ya han comenzado a cambiar su estrategia crediticia encareciendo las hipotecas a tipo fijo y bajando las variables
A todo lo anterior se le suma un turismo que no acaba de retomar su velocidad, cuya vuelta se esperaba como el maná para este año, por el conflicto en Ucrania y el incremento en los precios del transporte.
El BCE no parece que pueda aplicar la receta clásica de subir el precio del dinero para enfriar la economía y contener la inflación, ante un escenario con una economía que no acaba de despegar, la invasión de Ucrania y los problemas económicos que se avecinan.
La invasión de Ucrania ha cambiado el mundo y las perspectivas que teníamos para el 2021. Los precios de las materias primas como el gas, el petróleo, los aceites, los cereales seguirán subiendo. El incremento del coste de la gasolina afectará a los transportistas, causando desabastecimientos y problemas en las cadenas logísticas y de producción y los mercados bursátiles sufrirán una fuerte volatilidad. Menor consumo por la disminución de la liquidez producida por la inflación y por el ahorro causado por la incertidumbre.
Ante este panorama de incertidumbre creemos que el sector inmobiliario se convertirá en el refugio de muchos inversores.
Si estás pensando en invertir para alquilar,
¡calcula la rentabilidad y analiza tu inversión inmobiliaria!
He elaborado una práctica herramienta de cálculo de rentabilidad por alquiler que utilizo para analizar las operaciones de compra de mis clientes inversores.
El programa está diseñado en Excel y permite el análisis de una inversión inmobiliaria con el fin de obtener una rentabilidad anual por el alquiler y por venta futura. El programa se ha diseñado para que sea práctico y fácil de usar, solo debes introducir los datos del inmueble en la pestaña “Datos” y genera automáticamente un minucioso informe que puedes descargar en PDF en la pestaña “Informe” donde se puede añadir fotografías de la vivienda en los espacios habilitados.
Suscribiéndote a nuestra Newsletter recibirás gratis nuestro «Simulador de Precios de viviendas en Barcelona» y a la «Herramienta de Cálculo de la Rentabilidad»
